En esta época de falta de financiación puede pensarse que la
gestión del endeudamiento solo consiste en “pelearse” con los bancos para
lograr que nos den crédito y, además, que no sea a precios abusivos, olvidando
que una verdadera gestión del pasivo va mucho más allá.
DEFINICIONES ESTRATÉGICAS
Se necesita contar con una estrategia de endeudamiento, que defina la estructura deseada del
pasivo, la política de relaciones bancarias y las políticas operativas.
- La estructura deseada cuantifica las grandes categorías en las que se puede clasificar el endeudamiento (plazos, divisas, fuentes), siendo que la gestión diaria de tesorería se verá especialmente afectada por la decisión sobre el Fondo de Maniobra disponible.
- La estrategia de relaciones bancarias establece pautas sobre las fuentes y condiciones en que se podrá obtener la financiación.
- Las políticas operativas fijan aspectos tales como el enfoque de gestión del riesgo, el grado de autoridad delegada y los instrumentos financieros de uso autorizado.
EL PROCESO DE GESTIÓN DEL ENDEUDAMIENTO
La gestión de la deuda puede analizarse como un proceso
compuesto por las siguientes actividades:
- Identificación de las necesidades de fondos. Hay que conocer con suficiente antelación el volumen de necesidades, las divisas relacionadas y la duración de tal necesidad (diferenciando claramente entre necesidades permanentes y estacionales).
- Visión sobre la evolución de los mercados. Hay que tener opinión formada sobre la evolución previsible de las tasas de interés y los tipos de cambio a distintos plazos. Dada la volatilidad de los mercados financieros, esta visión necesita una reapreciación frecuente.
- Elección de fuentes de financiación. Es importante tener un buen conocimiento de los instrumentos financieros disponibles en el mercado (tanto de financiamiento como de cobertura de riesgos), entendiendo su mecánica, condiciones, ventajas y desventajas. Para la elección de las fuentes se aplican criterios como coste, garantías, plazos, etc.
- Negociación de las operaciones. Consiste en la discusión de las distintas condiciones, que lleva finalmente a concretar la operación con una fuente determinada.
- Seguimiento de las decisiones. Es necesario un análisis continuo de la cartera de pasivo a la luz de las condiciones y expectativas actuales del mercado, para poder proceder de inmediato a una eventual reestructuración de la misma ante cambios significativos con respecto a los supuestos empleados originalmente.
GESTIÓN INTEGRADA DE ENDEUDAMIENTO Y RIESGOS
Las características esenciales que definen a las operaciones
reales (divisa, plazo, etc.) son asimismo las variables que constituyen los
cuatro tipos principales de riesgos que genera el endeudamiento (de interés, de
cambio, de liquidez y de contrapartida), de ahí la conveniencia de una gestión integrada del endeudamiento y
sus riesgos.
HERRAMIENTAS DE GESTIÓN
La gestión del endeudamiento requiere de unos soportes organizativos (políticas,
sistemas de planificación financiera, sistemas para la gestión de deudas y
riesgos), que no siempre se encuentran adecuadamente provistos ya que sus
características van más allá de lo que pueden considerarse como herramientas
básicas.
GESTIONAR SUPERANDO LA COYUNTURA
La situación actual de los mercados financieros no debería
hacernos olvidar que una verdadera gestión del endeudamiento implica mucho más
que conseguir “como sea” cubrir las necesidades financieras.